Lady Gaga prefiere dejar sus atuendos extravagantes reservados para los Little Monsters, puesto que para su boda con el actor Taylor Kinney tiene previsto apostar por un diseño discreto y tradicional que demuestre lo "en serio" que se toma su paso por el altar. "Se toma este paso muy en serio y se casará con Taylor como Stefani, no como Gaga. Stefani es mucho más discreta que Gaga. Le han encargado a la Haus Of Gaga el diseño de su vestido, pero será muy sencillo y elegante", comenta una fuente cercana a ella a la revista heat.
El enlace se llevará a cabo muy en consonancia al vestido, en un ambiente tradicional a la italiana cuya recepción tendrá lugar en el restaurante neoyorquino Joanne Trattoria, propiedad del padre de la novia.
"Después de pensarlo mucho, se ha pensado que no habrá ningún vestido hecho con chuletas de carne ni un sacerdote escupefuego. Será una boda tradicional italiana y ella quiere que la recepción se celebre en el restaurante de su padre", añadió.
Lady Gaga y Taylor Kinney se comprometieron el pasado día de San Valentín y se cree que podrían pasar por el altar a finales de este verano.